Para ayudarte a comparar presupuestos: éste es el montaje mínimo que llevo a un show. Un fondo de escenario -útil en lugares pequeños elimina distracciones de cuadros, estanterías y tapa mis maletas-, luego un equipo de sonido es imprescindible -siempre llevo tres de potencias diferentes -sonorizo desde un comedor en un restaurante a la una plaza pequeña-. Aunque haya poca gente en la celebración la magia de escenario requiere control sobre ruidos y voces tan frecuentes sobre todo si hay niños a los que ¡excitamos para que participen! El mago debe de poder controlar y dominar con su voz sin chillar. Tengo diverso material de apoyo de luz, pues a veces se actúa en zonas mal iluminadas porque son un rincón, un lugar al fondo de todo, etc. El equipamiento de magia a veces entra premontado, sobre todo si me veo obligado a instalar todo delante del público, y en especial si es infantil. De este modo puedo reducir la hora de montaje a 45 minutos en un vestíbulo o un garaje y 15 minutos ante el público. Aunque si se puede lo que me gusta es montar con antelación a la llegada de todos, esto no siempre es posible. Llevo todo lo que necesito. Solo quiero un enchufe. No necesito camerino, ni un lugar para mis palomas o conejo, etc. Todo lo llevo.
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Mi equipo pequeño para magia en fiesta de empresa o magia para celebraciones
Algo que no se ve es que yo no dedico esa tarde-noche a ninguna otra actuación. Puede haber un retraso por cualquier cuestión organizativa que yo estaré listo para mi actuación sin recortar un minuto ni mirar el reloj para marcharme. En una celebración lo prioritario es que salga bien y el espectáculo debe de contribuir a ello, no convertirse en un problema porque resulta que el mago ha comprometido otra actuación en el mismo día. Del mismo modo que llegaré unas dos horas antes y si es un lugar con dificultades para aparcar estaré ahí antes que nadie, también me marcharé cuando ya no sea necesaria mi presencia. Así que ya ves no cobro por una hora de magia, sino por un día de trabajo, por tener un seguro de responsabilidad civil, por llevar absolutamente todo el material necesario -así que ya ves, tú solamente disfruta con tus invitados-. En definitiva vendo confianza en que todo saldrá como soñaste.
Porque adivinar la carta que alguien escoge de la baraja no basta. Se sa por hecho que un mago sabe hacer magia. Es todo lo demás lo que marca la diferencia ¿no?
Cualquier celebración familiar o fiesta de empresa, comuniones, bodas, etc, me lo tomo como si fuese mío. La magia no es un trabajo rutinario. Muchas veces en este tipo de contrataciones no hay una expectativa muy alta, nadie pretende en una boda normal que actúe Copperfield. A veces solo se pretende que llenemos un tiempo muerto o que entretengamos a los niños mientras los adultos toman una copa. Pues bien, para ello hay que llevar todo ese material mínimo. No siempre hay espacio para ponerlo todo pero ese es mi problema.
Trabajo en teatros, grandes eventos, festivales de magia… pero también cenas de empresa, cumpleaños, despedidas, bodas de oro… Pongo lo mejor de mí en cada evento sea grande o pequeño, porque no se puede adivinar media carta o hacer aparecer medio conejo, como no se puede desafinar porque no se tenga detrás presupuesto para una orquesta. La magia, el ilusionismo, tiene una gran versatilidad y hace que pueda amoldarse a un montón de circunstancias, edades y tipo de celebraciones. Un repertorio amplio, modificable sobre la marcha si hay una circunstancia que lo aconseje, un equipamiento que haga la experiencia agradable para todos si aparece más gente de la prevista, la tranquilidad de que no hay prisas y todo esta listo para cuando sea necesario. Es la garantía profesional que yo doy, después de más de treinta años de estar sobre las tablas.
Consúltame lo que quieras: iurgi@iurgimagia