Hay un anuncio de Casa Tarradellas en tv en el que un muchacho imagina la negativa de sus padres a «abandonar los estudios de Derecho para centrarse en la música». Para sus sorpresa los padres no se oponen. Bien, algo avanzamos. Sin embargo el discurso del muchacho insiste en la falsa idea de oponer estudios a ocupaciones artísticas. Mucha gente piensa así: es dejar una carrera por una ocupación incierta. En cuanto a la último, la incertidumbre de poder dedicarse al oficio que se ha aprendido, no es menor en las «carreras» pues todos sabemos de licenciados subempleados, con contratos indefinidamente temporales, precariedad en suma. Además nada garantiza que la profesión de hoy sea la demandada mañana.
En cuanto a lo de oponer «carrera» a «arte» el error es creer que estudiar música -por seguir con el ejemplo de Casa Tarradellas- no es una carrera. Por contra es una carrera de largo estudio. Claro que uno puede cantar o tocar la guitarra sin haber pisado un conservatorio. Lo mismo que uno puede cambiar un grifo sin haber hecho Formación Profesional. Pero quien quiera ser profesional elige mayoritariamente el camino arduo y exigente de realizar estudios.
La carrera de mago no se estudia en general en la Universidad, no tiene una enseñanza reglada. Aunque digo en general porque hay una Universidad que expende un título propio en Ilusionismo. Concretamente el Real Centro Universitario María Cristina en El Escorial. La carrera de mago es un título superior dentro del programa de Bellas Artes de este centro adscrito a la Universidad Complutense de Madrid. El programa de estudios es de tres años y esta avalado por la Federación Internacional de Sociedades Mágicas.
Por otro lado muchos magos estudian arte dramático es Escuelas que tienen su titulación. Otros aplican sus conocimientos de otros estudios a la magia, es el caso de quien ha estudiado pedagogía o psicología o, como es mi caso psicología social. Pero es cierto que la carrera de mago es mayoritariamente a base de seminarios, congresos, conferencias, etcétera. La libertad de expresión hace que uno pueda ser escultor, pintor, mago, actor o cantante sin titulación académica. Pero la inmensa mayoría se forma sea de manera no reglada o plenamente académica. De modo que el chico de Casa Tarradellas puede estar tranquilo. sus padres saben que la música es una carrera como otra cualquiera. Lo de influencer por ahora queda pendiente…
Si quieres saber sobre mí y mis magias hay pestañas arriba de este blog, También en www.navarcadabra.com