
A veces me preguntan cuál es el tipo de magia que más me gusta. Como espectador conocedor de distintas especialidades, disfruto con todas, siempre que haya una aportación nueva y personal, verdaderamente artÃstica.  Poco me importa si es un juego con naipes o la levitación de un piano.  La mejor magia es la más apropiada al tipo de público presente.  Hay una serie de especialidades que están en los lÃmites del ilusionismo: