Ayerdi es un hombre tenaz. Cuando vió a Channing Pollock en la pelÃcula «Europa de noche» (1959), haciendo aparecer palomas de la nada, en una puesta en escena que hoy se considera clásica, decidió que él también tenÃa que conseguir hacer esa magia elegante. Y ese hombre que apenas habÃa visto más magos que los de una compañÃa ambulante que recalará de vez en cuando en su pueblo guipuzcoano, me contaba que tuvo que entrar al cine una y otra vez para ver la escena del mago. Sin posibilidad de parar la imagen o de pasarla a cámara lenta. Y verdaderamente ver las técnicas de Pollock era endiabladamente imposible. Para ver la magistral actuación de Pollock, con lo que se comprende la dificultad que enfrentaba Ayerdi, pincha aquÃ:
Roque Ayerdi tuvo que deducir, imaginar, crear y recrear hasta elaborar, redescubrir algunas técnicas o idear otras nuevas y propias, creando un número inspirado en Pollock pero propio. No habÃa otro modo de aprender la magia de Alta Escuela. Luego su generosidad con algún compañero se verÃa traicionada y su número copiado… pero esta es ya otra historia. El dÃa 20 de abril un grupo de buenos amigos -Sueskun, uno de sus alumnos premiado en varios congresos de magia esta en la iniciativa- le homenajea en el vitoriano teatro «Jesús Ibáñez de Matauco», entre ellos Txan magoa y Taylor, habituales en la televisión vasca y un veterano especialista de la magia con palomas, el gran maestro riojano Alipio. Un dÃa bonito para Ayerdi que se merece el reconocimiento de la profesión.